El día de Miami, Memphis y el pistolero tapado

Ayer se jugaban los primeros partidos de estas semifinales de Playoffs. Dos eliminatorias en juego: Memphis y Oklahoma por un lado, y Miami y Boston por el otro. Hubo sorpresas, jugadas polémicas y buen baloncesto en una jornada de liga muy tempranera.

El primer partido jugado se lo gano Memphis a Oklahoma. El equipo de Tennessee no tuvo mucho tiempo de celebrar su histórico pase frente a San Antonio, y un par de días después ya estaba jugando las semifinales de conferencia, y encima ganaron. Ya en el primer cuarto tomaron la delantera en el marcador, y supieron mantenerla el resto del partido, a pesar de los intentos de Thunder por acortar distancias en el último cuarto. La victoria de los Grizzlies se cimento en un excelente trabajo defensivo que provoco muchas perdidas de pelota en el rival, hasta el punto de que los únicos anotadores reales para los Thunder fueron Durant, Westbrook e Ibaka. En ataque Memphis supo mover mejor la pelota, ataco mucho desde la pintura y aprovecho las transiciones para hacer mucho daño.

Marc Gasol fue ayer uno de los mejores en Memphis

Lo más sorprendente del caso Memphis es la mezcla de jugadores con la que están cosechando estos éxitos. La plantilla base es muy joven y tiene experiencia nula en Playoffs, sin embargo, jugadores como Allen, Randolph o Battier aportan la madurez que le falta al resto, al mismo tiempo que se contagian de la vitalidad y la energía de los más noveles. El resultado es un equipo muy equilibrado, que ataca y defiende de una manera muy inteligente, con muchas alternativas de juego y con unos jugadores que ahora más que nunca, saben jugar en equipo.

El segundo partido de ayer lo disputaban Miami y Boston en el American Airlines Center. Los expertos esperaban un partido muy defensivo y con mucho contacto físico por parte de los dos equipos, las expectativas se cumplieron. Al final la victoria fue para el equipo local, con una importante aportación de dos de sus estrellas, Lebron y Wade, y gracias a la actuación de James Jones. El alero firmo un partido de ensueño y fue una autentica pesadilla para los rivales, castigando todas las ayudas defensivas con certeros lanzamientos exteriores, el jugador acabo con 25 puntos en 28 minutos de juego, y solo lanzo 7 veces a canasta. Un escandalo. En cuanto a Boston, jugo un partido decente, pero tuvo muy poco acierto en ataque y concedió muchos tiros libres a los lanzadores de Miami.

James Jones en un lanzamiento a canasta

En el tramo final del partido fue expulsado Paul Pierce por doble técnica. Algo que sentó muy mal a Boston, que protestó mucho la decisión arbitral al considerarla injusta y sobredimensionada. Al final el equipo tuvo que jugar gran parte del último cuarto sin su jugador más determinante.